Hace ya tiempo que no escribía en el blog, la verdad no tenia nada en mente para publicar, y desde que empecé a trabajar pues es un no parar de hacer cosas y el tiempo libre pues solo descanso.
Bueno ya tengo 2 meses y algunas semanas trabajando en Maracaibo en el Rest. DA VINCI, estoy allí como Jefe de Partida, una cocina bastante grande, con una plantilla de cocineros amplia. El trabajo es muy fuerte con un ritmo (que por lo menos yo nunca había trabajado), sobre todo los fines de semanas entra y sale comandas desde las 11:30 am hasta las 6 que ya para un poco. Es como nosotros llamamos una cocina de batalla donde se cocina sin parar quizás masivamente sin contar las fechas como son (día de las madres, el padre y algunos días feriados) donde el trabajo se triplica.
La gente de Da Vinci es muy agradable, la filosofía del grupo me gusta, tienen una visión y manejo de restaurante muy interesante llevan más de 14 años abiertos y aun se mantienen con un nivel de clientela bastante alto. (Quizás sea uno de los que mas venden en Maracaibo) Una cocina muy bien equipada, con un surtido de alimentos y bebidas (DBA) el cual nos hace las pastas rellenas, cortes de proteínas, salsas, caldos, etc. El servicio es muy clásico los sabores muy tradicionales, la mayoría de los platos se han mantenido durante más de 10 años en la carta y creo que en muchos de los casos la gente va mas de una vez a Da Vinci y come el mismo plato por que le gusta y lo identifica por la calidad (quizás alguien va por que le gusta nuestra putanesca, la carbonara o el tan vendido cartoccio).. La junta directiva son muy preocupados por mantener la calidad en el servicio eso me gusta muchísimo, manejan y conocen todos los procedimientos del restaurante creo que ese punto es la diferencia de cualquier otro restaurante.
A veces es difícil llevar este ritmo de trabajo, recuerdo que los primeros días me quería ir de allí, ver y salir tantos platos, cocinar cocinar y cocinar, el calor tan extremo (calor propio de Maracaibo mas el calor de una cocina) creo que llegamos a 47ºC, pero poco a poco a pesar de los tropiezos e agarrado el ritmo de trabajo, mas rápido de lo esperado, a veces recuerdo el libro de Antony Bourdain, donde dice que hay que estar loco para ser cocinero.
A pesar de lo duro que sea trabajar en Da Vinci estoy disfrutando el momento y aprendiendo sobre todo un mundo nuevo que nunca había entrado que es la cocina italiana.
2 comentarios:
Echo de menos la cocina Italiana!! :)
Me alegra ver que has publicado de nuevo!!
un saludo!
Gracias Esther, si estare publicando de nuevo algunas cosas. Si la verdad la cocina Italiana es otro mundo aparte, sus salsas, bases, sabores, mezclas, es muy interesante. yo nunca habia trabajado Comida Italiana
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